lunes, 18 de octubre de 2010

Resurrección


Cuando la maestra salió le lancé un descomunal taquito a la negra Tania, el cual fue absorbido por su afro amansado a punta de litros de linaza. Ella ni volteó. En vano me quedé al pendiente de si el proyectil salía, pero no ocurrió. Ese día caí en cuenta de que, desde primer grado, siempre había estudiado con un negro, un chino, un gordo, un marico, un evangélico y un pelirrojo. No siempre eran los mismos, pero si por alguna razón uno no se inscribía en el curso siguiente, lo sustituía otro de idénticas características. Me pareció fantástico.

Luego, ya en la universidad, andaba yo en un grupo con menos diversidad étnico-religiosa, pero cuyos arquetipos también se podían identificar con facilidad: un habla paja, un chulo (que valía por varios), un lisiado, un payaso y, como una muestra de nuestra magnanimidad, un chavista. Claro, ni hablar de salir con el chavista justo después de unas elecciones, tampoco era una relación masoquista. Lo único incomodo, y por esas cosas de que uno anda recortado con la plata cuando está en la universidad, era salir con el chulo, porque coño, de pana ya estaba mutando a sanguijuela. Pero eso también se resolvió, aunque no crean que fue porque el tipo dejó de ser chulo, no; como me dijo una persona hace poco: en un proceso evolutivo darwiniano, el carajo no sobrevivió. Rest in peace my friend (my friend?... whatever).

En fin, hace poco estuvimos por ahí viendo béisbol y tomando cervezas y el lisiado se presentó con un amigo que traía consigo a un microbio. El amigo pues, un tipo normal con el que se habla sólo porque el silencio tiende a ser incomodo. Por su parte, el microbio se bebió media botella de whisky y de cuando en cuando se reía agitando su cuerpo Lepidóptero y mostrando sus incisivos. Cuando la bebida se acabó ambos se despidieron y se largaron sin pagar. Los demás nos vimos sin decir nada, como cuando pasa un ángel o nace una puta, dejando en el ambiente una maldita premonición: el chulo resucitó.




Blogalaxia Tags:

No hay comentarios:

Publicar un comentario